El riesgo aritmético
El curso clínico de la enfermedad suele ser benigno y muchos pacientes son asintomáticos o tienen síntomas leves. Una minoría de pacientes están en riesgo de arritmias, algunas de las cuales también pueden ser potencialmente mortales. Por lo tanto, la investigación de los últimos 20 a 30 años se ha centrado en identificar a la minoría de pacientes con alto riesgo arrítmico que pueden beneficiarse de la implantación de un desfibrilador automático.
Los principales factores de riesgo de arritmia son:
- Paro cardíaco previo a la detención o arritmia ventricular prolongada, que provocó un colapso cardíaco
- Síncope (desmayo con pérdida del conocimiento) por una causa desconocida (por ejemplo, desmayo debido a una muestra de sangre o cambios repentinos de posición no se debe considerar como un factor de riesgo)
- Presencia en la familia de uno o más casos de personas que murieron repentinamente cuando eran jóvenes
- Aumento importante del grosor (hipertrofia) de la pared del corazón
- Arritmias ventriculares repetitivas (taquicardia ventricular) detectadas mediante monitorización con ECG Holter de 24 horas
El juicio del médico es importante para evaluar los factores de riesgo, su gravedad y combinación, y la estratificación del riesgo es individual para cada paciente. Por lo tanto, es esencial que la estratificación del riesgo se lleve a cabo en centros especializados en esta enfermedad.
El riesgo de arritmia puede variar con el tiempo, por lo que es aconsejable que los pacientes con miocardiopatía hipertrófica sean seguidos con visitas regulares (generalmente cada 6-12 meses).